flores

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lunes, 27 de junio de 2011

VOLVER A CASA

Como todos los días, después de desayunar, escribí algo en mi diario. Pero tenia la sensación de que no iba a ser un día como los demás. Hoy a últimos de junio hace un calor terrible, no tengo pensado hacer nada, con este calor no hay quien salga a la calle hoy no daré mi paseo habitual, estoy muy cansada. Después de escribir algunas lineas, cerré el diario y me puse a leer, sentada cerca de la ventana frente al aparato de aire acondicionado.Leía uno de esos libros que hacia años que leí, me apetecía volver a releerlo, ya casi lo estaba terminando y me había gustado igual ó mas que la primera vez, hice una parada, levante la vista y fue entonces cuando la vi.------ No sabría decir si era hermosa y deslumbrante ó simplemente diferente a otras.---- Según se acercaba quería recordar de que la conocía pues no me era del todo desconocida, había entrado en mi casa sin llamar,¿quizás me dejé la puerta abierta? no se, me cuesta ya recordar hasta lo que he echo un momento antes.---- Cuando la tuve frente a mí, nos miramos a los ojos y sin decirnos nada supe que ella si me conocía, me sonrió y tendiendo las manos cojió las mías y sentí que quería que la siguiera.---------------- Salimos a la calle, todo me parecía diferente, me extrañó que a esa hora no hubiese nadie, señoras a la compra con sus carritos, niños en sus últimos días de colegio, nadie todo solitario.-- Anduvimos un buen rato, cuando volví la cabeza para ver a que distancia estábamos de mi casa, vi extrañada que seguía sentada en mi butaca con el libro entreabierto en las rodillas la miré a ella y sin decirme nada soltó mis manos y me indicó que siguiera adelante, me dejó sola y sin saber que hacer empecé a caminar, el paisaje había cambiado de repente, todo era blanco como de algodón tuve la sensación de caminar sobre algo blando.----- Cuando llegué a lo que me pareció el final del camino, me detuve miré a mi alrededor y fue entonces cuando vi la calle llena de gente que iban y venían me miraban y me saludaban como si me conocieran de toda la vida, una de ellas me indicó que subiera mas arriba que allí acabaria mi camino.--- Seguí un poco más y al llegar vi algo diferente a todo lo conocido, y sin saber por qué supe que había llegado a casa, que había regresado a mi hogar, al que había dejado ya hacia 60 años. Estaba en casa.

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